sábado, 13 de noviembre de 2010

Fragmento en español de la cancion bresso de lacrimosa

Aquí sentado, cuan purificado me ves.

Sin amor - vacío y enfermo,

Desangrado - totalmente agotado,

Sin embargo tu amor corre por mis venas,

No estoy muerto, no, no estoy muerto,

Escucho aún tu voz hablarme,

Aún siento tus labios sobre mi piel.

Aún tu luz brilla en mí,

Aún te amo,

Aún quiero conocerte,

Quiero acercarme a tu alma,

Quiero perderme completamente en tí,

Toda tu belleza, todo tu brillo,

El castigo por amarte, el castigo de mi amor.

Y ahora te pregunto ¿dónde estas?

¿Dónde estás ahora?

jueves, 16 de septiembre de 2010

Anathema - one last goodbye


Oh como te necesitaba

Como me lamento ahora que te has ido

En mis sueños te veo

despierto tan solo



Yo se que no querías irte

Tu corazón anhelaba quedarse

Pero la fuerza que siempre ame en ti

Finalmente cedió.



De algún modo sabia, que me dejarías de este modo

De algún modo sabia, que nunca podrías, nunca podrías quedarte

Y en la temprana luz de la mañana

Después una noche silenciosa y tranquila

Te llevaste mi corazón…

Y me lamento



En mis sueños puedo verte,

puedo decirte cómo me siento

En mis sueños puedo abrazarte

Y se siente… tan real



Aun siento el dolor

Aun siento tu amor

Aun siento el dolor

Aun siento tu amor

Y de algún modo sabia que nunca podrías quedarte

Y de algún modo sabia que me dejarías

Y en la temprana luz de la mañana

Después una noche silenciosa y tranquila

Te llevaste mi corazón…



Y me lamento

Yo desee, desee que te hubieras quedado

viernes, 30 de julio de 2010

Limberg 2ª y ultima parte


Busco mi teléfono móvil por toda mi habitación pero no lo encuentro, histérica por no encontrarlo me siento en la cama y desde el filo exterior de mi ventana oigo mi móvil sonar, extrañada corro hasta la ventana, allí esta el teléfono y junto a él una nota, la cojo mirándola, en ella hay escrita con una perfecta caligrafía una frase “ os dejasteis este aparato en mi mansión” Me quedo fría tirando sin percatarme el teléfono al suelo, ahora se que no fue un sueño…¿qué es él? ¿Qué quiere de mí?

Decido volver a la mansión del bosque, aun es de día, así volveré a casa antes del anochecer. Llego al gran caserón; desde fuera parece inhabitado, abro la verja que da a su jardín, esta perfectamente cuidado lleno de rosales, aquella noche ni me fije en este aspecto de la mansión, tras un minuto contemplando su belleza entro en la mansión, la puerta estaba abierta, como si me invitara a pasar, todo en su interior parece sacado de una película de época; las ventanas están totalmente cerradas de modo que no entraba ni un misero rayo de sol, subo las escaleras que conducen al piso de arriba, alumbrando el camino con la luz del móvil, es curioso… todas las habitaciones están abiertas excepto una, giro el pomo de la puesta de esa habitación recordando en mi mente “ la curiosidad mato al gato” pero no puedo evitarlo es como si la puerta me obligara a abrirla, cierro los ojos y entro en la habitación cogiendo aire, esta toda iluminada por un circulo de velas, y en su centro un ataúd.

Una corriente de aire apaga las velas y suena un crujido desde el interior del ataúd, lo alumbro con la luz del teléfono y antes de poder mirarlo noto una respiración en mi nuca , grito, grito con todas mis fuerzas y corro hasta la ventana, es la única salida que veo, pero él se pone en medio;



- Tranquila no te voy a hacer daño – me dice Limberg con voz dulce y pausada -.



Esa voz… me deja sin casi poder respirar, acaricia mi rostro, su tacto es tan frío… mi cuerpo vuelve a no responder a mis ordenes pero estoy consciente, él esta parado delante de mi, serio, tengo miedo de lo que pueda hacer conmigo. Me coge en brazos y me lleva a otra habitación, tumbándome en una gran cama que hay allí, cuando estoy tumbada me tapa con una manta, estoy fría como un muerta e intenta darme calor, se sienta junto a mi y sonríe, ahora me fijo en sus dientes, en sus colmillos más largos de lo habitual… si va a matare…que lo haga ya…no aguanto más:



- Os doy miedo lo sé, deberíais tranquilizaros, no voy a haceros nada, cuando estéis bien os llevaré a la ciudad para que podáis volver a casa – me dice con un tono de voz que transmite preocupación-.



Habla como lo hacían antaño, debe tener siglos de edad; pero parece tan joven. Me deja sola en la habitación, todo se queda en silencio y me quedo profundamente dormida y despierto al día siguiente, junto a la cama hay una meda de té llena de comida de todo tipo, me incorporo buscando a Limberg con la mirada, no esta, suspiro y miro la comida hambrienta y cuando pestañeo allí esta con una bandeja con más comida:



- Comed, no me acuerdo muy bien de cocinar, hace mucho que no necesito hacerlo, y no sabía que clase de comida os gusta por lo que he comprado de todo – sonríe alegremente consiguiendo arrancarme una sonrisa-.



Como un poco y despacio, tengo su alegre mirada clavada en mi, cuando a los dos bocados dejo de comer su expresión cambia a desilusión, verle así me rompe el corazón en mil pedazos, no es que no me guste la comida, sino que al saber que me mira me siento incomoda; pero para no verle triste como de todo lo que a traído, incluso de lo que ha cocinado para mi, al verme comer como un animal vuelve a alegrarse e incluso ríe, para ser un vampiro no parece tan terrorífico como les ponen en las películas y novelas, al terminar de comer se hace un gran silencio, tengo curiosidad por saber quien es él, su historia, asíque decido preguntarle :



- ¿Cómo llegaste a ser…lo que eres? – evito la palabra vampiro por si acaso le molestara-.



Limberg me mira y sonríe, camina hacia la cama y se sienta a mi lado:



- Fue en el siglo XVI, yo tenia 19 años y el mismo aspecto que tengo ahora, una especia de teatro llegó a la ciudad y tuve que acompañar a mi prima para verlo, ya que mi tío no la dejaba ir sola – hace una pausa mirándome y sonriendo – la función era aburrida hasta que salio la actriz protagonista, era realmente hermosa y atrayente, verdaderamente su efecto era sobrenatural, todos los hombres la observaban con miradas lasciva, pero mi atención solo la tubo durante unos segundos, no me llamaba la atención, por aquel tiempo yo estaba enamorado de otra dama – suspira tristemente – al acabar la función uno de los actores secundarios se acerca a mi diciéndome que Lady Noir quería que acudiera a sus camerinos, yo no quería ir a verla; pero mi prima me obligo y ella se marchó con una amiga, no quería volver a verme a no ser que le llevara un autógrafo de la actriz, llegue al camerino, allí estaba Lady Noir tapada con una fina bata de seda roja, caminó hacia mi y me preguntó con voz seductora si no había sido de mi agrado la función, por aquel entonces yo era demasiado borde por lo que le dije que observar a mi perro dormir me parecía mucho más interesante, ella se echo a reír con mi respuesta y yo caminé hacia la puerta, como despedida me dijo que pronto el humano mas bello la acompañaría en el escenario, extrañado por su respuesta volví a mi casa – hace una pausa para mirarme y vuelve a sonreír al verme metida en la historia – durante una semana no paraba de recibir citaciones de ella, pero yo nunca acudía, por las noches mientras dormía llegué a sentir su presencia; pero cuando me despertaba no había nadie, al cabo de la semana apareció el cadáver de mi amada con dos marcas en el cuello y desangrada…, la tristeza empezó a consumirme, pasaba las noches en el cementerio tocando el violín, una noche apareció ella en el cementerio e intento que la tomara sobre la tumba de la mujer a la que amaba, al ver mi negación se abalanzó sobre mi cuello bebiendo de mi sangre, me dejo en la línea entre la vida y la muerte, no quiero matarte me dijo, mi respuesta fue decirle que yo si quería la muerte, entonces me miro con odio se hizo un corte en la muñeca y me obligo a beber de su sangre – para de relatar su historia y me mira a mis ojos ansiosos por saber más – mi cuerpo empezó a dolerme, sentía como moría, ella estaba de pie mirando como agonizaba hasta que deje de sentir dolor, me mire las manos eran muy pálidas ahora, sentí miedo, pánico por lo que ahora era, ni siquiera tenía las marcas de su mordedura en mi cuello, y así es como me convirtieron en lo que ahora soy.



El relato de aquella historia me conmovió y estremeció, tan bello ser y tan triste pasado; pero quiero saber más de él, que pasó después de su conversión:



- Sabéis mi nombre, pero yo no se el vuestro – me dice mirándome las zapatillas -.

- Amy – le doy mi nombre confiando en él -.

- Bien Amy sé que queréis saber más sobre mi, puedo leeros la mente – sonríe encantadora e inocentemente-.



Al ver esa sonrisa siento mi corazón palpitar rapidamente, sus colmillos ahora son más largos, antes de que me de un ataque de ansiedad siento sus fríos labios sobre los míos, cierro los ojos sintiendo su suave y frío beso:



- Me gusta vuestra mente y me gusta vuestro corazón - me dice mientras acaricia mi mejilla – pero convertirte seria egoísta por mi parte y me odiaría eternamente por ello.

- Tienes sed ¿me mataras? – mi voz apenas suena-.

- No – miro sus labios mientras se niega a matarme –



Vuelve el silencio, el incomodo silencio, abrazo mis rodillas deseando volver a sentir sus labios en los míos, me levanta la cabeza quedándonos mirándonos a los ojos, con un dedo recorre mis labios antes de volver a besarlos:



- ¿Queréis que os cuente como llegué hasta aquí? – me pregunta mirándome a los ojos-.

- Si – le digo firmemente y él me mira con una sonrisa-.

- Lo primero que vi tras renacer en las tinieblas fue a ella riéndose de mi, los ángeles de piedra del cementerio parecían mirarme y llorar por mi destino, ella paró de reírse, mirándome sonreía y me preguntó mi nombre, me quede pensando, para mi familia tendría que estar muerto, me negaba a que supieran lo k yo era ahora; por lo tanto le di un nombre falso, Limberg, ese fue el nombre y por el cual me conocen desde aquel momento, la vampira me sacó del cementerio y me llevó junto a su compañía de teatro, todos eran vampiros – hace una leve pausa – Allí vi que esa misma noche también habían convertido a una joven noble, ella me reconoció y corrió hasta mi abrazándome, pero Lady Noir la apartó de mi rápidamente, ella me enseño todo lo que podría necesitar saber un vampiro novato aquella misma noche, durante un mes puse en practica aquellos conocimientos, hasta que un día al llegar al teatro para dormir vi en el suelo lo que había sido la cena de mi conversora, me acerque a ella y al verla…la ira se apoderó de mi, aquel cadáver esa mi hermana – una lagrima asomó por sus ojos – todos descansaban en sus ataúdes y yo abrazaba a mi hermana, la joven novata se acercó a mi secando mis lagrimas con los pulgares, me quito el cadáver de las manos diciéndome que ella la llevaría a casa, aun faltaba una hora para que saliera el sol abrí todas las ventanas para que una vez amanecido entrara la luz, después destape todos los ataúdes, todos estaban dormidos por lo que no se dieron cuenta de nada, Salí del teatro, fuera la otra vampira me esperaba montada en un carruaje sin ventanas, monté con ella, juntos nos alejamos de allí y pasamos 30 años en las sombras , después de ese tiempo decidí alejarme de todo, los fantasmas del pasado me perseguían mientras dormía, a deje a ella sola y llegue a esta mansión, los que la habitaban eran unos jóvenes nobles, usando los poderes que como vampiro había adquirido, hice que los nobles huyeran y que todo el mundo pensara que esta casa estaba maldita, decidí dormir para siempre – me sonríe – pero vuestra presencia me despertó.

- ¿Mi presencia? – le pregunto extrañada -.

- Os caísteis en el bosque y vuestras rodillas sangraron, el olor de lustra sangre me llevó hasta vos; pero me negué a matarte me visteis y me seguisteis, el resto de la historia la sabéis – sonríe como si lo que explicara fuera lo más normal del mundo-.

- Dime como te llamabas antes – le digo curiosa-.



Me mira serio, creo que he metido la pata, se levanta cojiendome en brazos, no se que hacer, me lleva hasta su ataúd, en la tapa se puede leer un nombre, su nombre, Luc de Lepoint, le miro a los ojos, solo he estado unas pocas horas con él; pero ahora creo que le necesitare toda mi vida; aunque él no quiere convertirme, abre la tapa con una patada y me tumba dentro, me incorporo mirándole, él esta arrodillado, me acaricia el rostro y el cuello:



- No te vallas de mi lado – le susurro al oído -.



Siento su mordedura, como bebe de mi sangre y como con cada trago que da de ella mi vida se esfuma; pero para antes de que mi corazón deje de latir, le miro temerosa, besa mis labios y se hace un sencillo corte en la muñeca dándome de beber su sangre, bebo de ella, jamás pensé que no desearía parar, me aparta con delicadeza, mi cuerpo comienza a dolerme, parece como si hubiera bebido el mas sabroso veneno, mi corazón se para; pero sigo consciente, vuelve a latir y mis ojos dejan de verlo todo tan tétrico, ahora lo veo algo más mágico, miro a Limberg, la atracción que ejerce sobre los humanos ya no me afecta,. Pero no era su atracción lo que he visto en él, le abrazo, su tacto ya no es tan frío.



- ¿Quién eres? – me preguntó-.



Le miro extrañada, pero comprendo lo que quiere decirme, Amy a muerto y ahora debo adoptar otro nombre, pero para mi adoptar otra identidad es como ser alguien distinto, al verme preocupada Limberg me abraza y susurra en mi oído “lo siento”, siento su dolor por haberme convertido, mi don de las tinieblas, puedo sentir sus emociones: pero no se lo que piensa, él está a punto de romper a llorar, no quiero verle así, desesperada consigo mirarle a los ojos, pienso rápidamente un nombre cualquiera:



- Aisha – le digo sintiéndome impotente ante su dolor -.



De pronto el dolor cambia a alegría, jamás pensé que una persona pudiera cambiar de ánimo tan rápido, me sonríe, me sigue enamorando esa sonrisa, es tan perfecta…





Han pasado los años, al ver la noticia de mi desaparición nos mudamos a la vieja Europa, llevamos 50 años aquí, él sigue causándome el mismo efecto que al principio, me sigue atrayendo y enamorando su forma de ser; pero no puedo soportar el peso de las muertes que causo, decido dormir, no sin pensar en sus sentimientos, aunque siento que esta dolido sorprendentemente para mi él decide dormir junto a mi hasta que algo nos despierte, quizás no lo hagamos nunca, quien sabe, quien lea esto ya sabe mi historia, no fui asesinada ni nada por el estilo, como se insinuó en las noticias, simplemente cambie mi vida por…¿amor?



lunes, 19 de julio de 2010

LA DAMA DE SHALOTT

LA DAMA DE SHALOTT

I

A ambos lados del rio se despliegan

sembrados de cebada y de centeno

que visten la meseta y el cielo tocan;

y corre junto al campo la calzada

que va hasta Camelot la de las torres;

y va la gente en idas y venidas,

donde los lirios crecen contemplando,

en torno de la isla de allí abajo,

la isla de Shalott.

El sauce palidece, tiembla el álamo,

cae en sombras la brisa, y se estremece

en esa ola que corre sin cesar

a orillas de la isla por el rio

que fluye descendiendo a Camelot.

Cuatro muros y cuatro torres grises

dominan un lugar lleno de flores,

y en la isla silenciosa vive oculta

la Dama de Shalott.

Junto al margen velado por los sauces

deslízanse tiradas las gabarras

por morosos caballos. Sin saludos,

pasa como volando la falúa.

con su vela de seda a Camelot:

mas, ¿quién la ha visto hacer un ademán

o la ha visto asomada a la ventana?

¿O es que es conocida en todo el reino,

La Dama de Shalott?

Sólo al amanecer, los segadores

que siegan las espigas de cebada

escuchan la canción que trae el eco

del río que serpea, transparente,

y que va a Camelot la de las torres.

Y con la luna, el segador cansado,

que apila las gavillas en la tierra,

susurra al escucharla: "Ésa es el hada,

La Dama de Shalott".

II

Allí está ella, que teje noche y día

una mágica tela de colores.

Ha escuchado un susurro que le anuncia

que alguna horrible maldición le aguarda

si mira en dirección a Camelot.

No sabe qué será el encantamiento,

y así sigue tejiendo sin parar,

y ya sólo de eso se preocupa

la Dama de Shalott.

Y moviéndose en un límpido espejo

que está delante de ella todo el año,

se aparecen del mundo de las tinieblas.

Allí ve la cercana carretera

que abajo serpea hasta camelot:

allí gira del río el remolino,

y allí los más cerriles aldeanos

y las capas encarnadas de las mozas

Pasan junto a Shalott.

A veces, un tropel de damiselas,

un abad tendido en almohadones,

un zagal con el pelo ensortijado,

o un paje con vestido carmesí

van hacia Camelot la de las torres.

Y alguna vez, en el azul espejo,

cabalgan dos a dos los caballeros:

no tiene caballero que la sirva

la Dama de Shalott.

Pero aún ella goza cuando teje

las mágicas visiones del espejo:

a menudo en las noches silenciosas

un funeral con velas y penachos

con su música iba a Camelot;

o cuando estaba la luna en el cielo

venian dos amantes ya casados.

"harta estoy de tinieblas", se decía

la Dama de Shalott.

III

A un tiro de flecha de su alero

cabalgaba él en medio de las mieses:

venía el sol brillando entre las hojas,

llameando en las broncíneas grebas

del audaz y valiente Lanzarote.

Un cruzado por siempre de rodillas

ante una dama fulgía en su escudo

por los remotos campos amarillos

cercanos a Shalott.

Lucía libre la enjoyada brida

como un ramal de estrellas que se vé

prendido de la áurea galaxia.

Sonaban los alegres cascabeles

mientras él cabalgaba a Camelot:

y de su heráldica trena colgaba

un potente clarín todo de plata;

tintineaba, al trote, su armadura

muy cerca de Shalott.

Bajo el azul del cielo despejado

su silla tan lujosa refulgía

el yelmo y la alta pluma sobre el yelmo

como una sola llama ardían juntos

mientras él cabalgaba a Camelot.

Tal sucede en la noche purpúrea

bajo constelaciones luminosas,

un barbado meteoro se aproxima

a la quieta Shalott.

Su clara frente al sol resplandecía,

montado en su corcel de hermosos cascos;

pendían de debajo de su yelmo

sus bucles que eran negros cual tizones

mientras él cabalgaba a Camelot.

Al pasar por la orilla y junto al rio

brillaba en el espejo de cristal.

"tiroliro", por la margen del rio

cantaba Lanzarote.

Ella dejó el paño, dejó el telar,

a través de la estancia dio tres pasos,

vio que su lirio de agua florecía,

contempló el yelmo y contempló la pluma,

dirigió su mirada a Camelot.

Salió volando el hilo por los aires,

de lado a lado se quebró el espejo.

"Es ésta ya la maldición", gritó

la Dama de Shalott.

IV

Al soplo huracanado del levante,

los bosques sin color languidecían;

las aguas lamentábanse en la orilla;

con un cielo plomizo y bajo, estaba

lloviendo en Camelot la de las torres.

Ella descendió y encontró una barca

bajo un sauce flotando entre las aguas,

y en torno de la proa dejó escrito

La Dama de Shalott.

Y a través de la niebla, río abajo,

cual temerario vidente en un trance

que ve todos sus propios infortunios,

vidriada la expresión de su semblante,

dirigió su mirada a Camelot.

Y luego, a la caída de la tarde,

retiró la cadena y se tendió;

muy lejos la arrastró el ancho caudal,

la Dama de Shalott.

Echada, toda de un níveo blanco

que flotaba a los lados libremente

-leves hojas cayendo sobre ella-,

a través de los ruidos de la noche

fue deslizándose hasta Camelot.

Y en tanto que la barca serpeaba

entre cerros de sauces y sembrados,

cantar la oyeron su canción postrera,

la Dama de Shalott.

Oyeron un himno doliente y sacro

cantado en alto, cantado quedamente,

hasta que se heló su sangre despacio

y sus ojos se nublaron del todo

vueltos a Camelot la de las torres.

Cuando llegaba ya con la corriente

a la primera casa junto al agua,

cantando su canción, ella murió,

la Dama de Shalott.

Por debajo de torres y balcones,

junto a muros de calles y jardines,

su forma resplandeciente flotaba,

su mortal palidez entre las casas,

ya silenciosamente en Camelot.

Viniendo de los muelles se acercaron

caballero y burgués, señor y dama,

y su nombre leyeron en la proa,

la Dama de Shalott.

¿Quién es ésta?¿Y qué es lo que hace aquí?

Y en el cercano palacio encendido

se extinguió la alegría cortesana,

y llenos de temor se santiguaron

en Camelot los caballeros todos.

Pero quedó pensativo Lanzarote;

luego dijo: "tiene un hermoso rostro;

que Dios se apiade de ella, en su clemencia,

la Dama de Shalott".

miércoles, 14 de julio de 2010

martes, 6 de julio de 2010

Favole

"Jamás un ente nocturno sintió algo parecido por otro ser vivo. Ella, que debió ser banquete de inmortales, durmió aquella noce junto al cuerpo helado de Ezequiel, sumergida en las gélidas caricias de la mortandad. Pasaron cientos de Lunas, y ella supo entonces de la condena eterna del ser que salvó su vida. Cautivada por el espectro inmortal, quiso ser partícipe de su desdicha, para beber eternamente de la funesta condenación...
"Sus bocas lucían rojas como rubíes mientras mostraban los colmillos con muecas diabólicas y sus cuerpos céreos giraban alrededor del espectro vampiro, que se habia desmayado en el salón, víctima de aquel embrujo musical. Lentamente, las melodías dejaron de sonar, las carcajadas desaparecieron junto con los fantasmales bailarines, y se hizo el mas profundo silencio, mientras las llamas de las velas perdían fuerza y sumían el ambiente en la más oníca oscuridad..."

"De aquella última madrugada relampageante recordó, ofuscado, la ingenuidad de sus anhelos y contuvo el deseo de destruir todo aquello que, en aquella misma alcoba, rodeaba su inmundicia. Tras un sollozo impotente, el príncipe siniestro continuó evocando su desgracia, remorando arrepentido su cólera, después de rechazar sus súplicas para no condenar su cuerpo a tan pútrida existencia."


Victoria Frances, textos sacados de los libros con titulo Favole

Cascabel

Si cierras los ojos el mundo no desaparece,
solo te vuelves ciega ante el, ante todos sus males y también ante todos sus bienes, aveces me gustaría seguir teniendo la inocencia de una niña, y que todo mi mundo fuera mi pequeño cascabel del que no me separaría por lo ¿feliz? que me siento al escucharlo sonar... Pero ya no soy una niña, se que el mundo existe aunque cierre los ojos y no lo vea, tendré que caminar con los ojos bien abiertos sin soltar mi cascabel, y buscando otros tantos que como él me hagan feliz al escucharlos...

jueves, 24 de junio de 2010

Limberg 1ª parte

Abro los ojos en medio de una gran oscuridad, mi cabeza parece que en un momento u otro estallara, miro a mí alrededor; pero n reconozco aquel lugar. Estoy tendida en el suelo, esta frío y polvoriento, creo que me encuentro en la gran mansión abandonada del bosque; pero ¿Cómo he llegado hasta allí?


Me incorporo lentamente y siento la presencia de alguien más en este extraño lugar, me quedo quieta explorando con la mirada. Una mano acaricia desde atrás mi cuello, asustada me giro rápidamente y le veo a él. Ahora lo recuerdo, llegué a esta mansión siguiéndole ¿Quien es? Su aspecto es muy frágil, su piel es muy pálida, sus cabellos casi blancos, y sus ojos de un azul celeste, estos rasgos junto a su figura alta, estilizada, y su rostro…es tan…bello… su sola presencia es atrayente, intento moverme pero no lo consigo, intento gritar pero no puedo, hasta que quita sus ojos de mi no consigo mover mis piernas, es entonces cuando corro lo mas velozmente que puedo hacia la puerta; pero no se porque no la abro y me giro para mirarle; pero ya no esta, asustada miro hacia los lados… no esta, me vuelvo de nuevo hacia la puerta y cojo el picaporte nerviosa y le siento a él susurrándome al oído, “no tengas miedo” Grito con todas mis fuerzas hasta que él me tapa la boca co su mano, está muy fría, me quedo de nuevo completamente quieta y en silencio, él abre la puerta, es de noche, la luz de la luna le hace aun mas hermoso, bello, atrayente, misterioso… me coge con su fría mano y me saca fuera, reuniendo fuerzas consigo hablar:



- ¿Quién eres? – mi voz suena temblorosa al pronunciar estas palabras-.

- Limberg es mi nombre, os sacare del bosque, su familia debe de estar preocupada – me estremezco al escuchar su voz, firme, dulce, delicada, la misma voz que podría tener un ángel -.



Mis piernas siguen sin responder por el miedo; pero antes de que caiga al suelo, él me coge en brazos y me lleva através del bosque hasta las afueras de la ciudad.



- No se donde os alojáis – me dice sonriendo-.



Me baja hasta el suelo poniéndome de pie, intento no mirarle a los ojos para no caer de nuevo en su embrujo, cuando alzo la mirada… no esta, camino hasta casa, pálida por el miedo, mi madre asustada por mi mala cara llama al médico; pero yo estoy bien solo tengo miedo… El doctor me manda reposo y haciéndole caso me paso tres días durmiendo; curiosamente no he tenido pesadillas. Quizás Limberg solo fe un sueño…

lunes, 24 de mayo de 2010

vampire


El silencio de las tumbas para nada es un silencio
Millones de muertos están llorando en sus tumbas,
pero nadie les puede oir...nada nunca oye
Nadie puede oirles excepto los propios muertos
No podemos morir,no, no podemos morir,
no importa si lo intentamos
Odiamos...tememos lo viviente
evitamos el sol
nuestras amadas tumbas nos protegen dentro

domingo, 9 de mayo de 2010

sábado, 10 de abril de 2010

Mimo


Todo el mundo pasea por las calles de la ciudad italiana, en el parque se escucha el sonido de un violín, una alegre melodía que desprende el instrumento de Gabriel, el mimo que ronda el parque buscando la sonrisa de las personas sin decir ni una sola palabra, Gabriel se considera a si mismo como " el mimo que es feliz con tu sonrisa"...pero...los mismos también sienten, también se enamoran, también lloran.
Gabriel hace tiempo que tiene su corazón destrozado, amó a una mujer, con la que compartía su tiempo; ¿pero que era él para ella? Gabriel ya ni siquiera sonríe mientras hace sus trucos, ya no tiene la razón de su sonrisa.
encerrado en su casa recuerda en cada objeto a Madelein, a aquella mujer que amó más que a si mismo, recuerda tantos momentos junto a ella, su sonrisa, su mirada...
en un jarrón se encuentra marchita la ultima rosa, que le regalaría a Madelein, cuando la mira recuerda cada rosa que le regalaba, haciéndola aparecer con un sencillo truco de magia, pero esta ultima rosa nunca apareció, Gabriel sin palabras le había expresado sus sentimientos a Madelein; pero ella había echo caso omiso a aquel mimo enamorado.
todos los días se veían e el mismo parque, hasta que aquel ultimo día la vio con él, con otro hombre, juntando sus labios, fundiéndose en un beso, después la vio marchar, Gabriel se negaba a si mismo la marcha de su amada; pero ya era tarde, se había quedado muerto por dentro y se preguntaba una y otra vez ¿ donde esta?...¿donde esta?
Para olvidarla cogió todas sus cosas, las cuales no estaban unidas a ella, y dejando todo aras, cambia su ciudad por, la ciudad de los canales, Venecia, allí no había nada referente a ella y con una sonrisa se dijo a si mismo "no estoy muerto".
Gabriel se planta en una plaza y comienza a tocar su violín, la primera persona que se planta ante él, es una joven que deposita unas monedas, todos los días a la misma hora la joven se presentaba ante él y le echaba unas monedas en la funda del violín. Un día de lluvia Gabriel le refugió debajo de unos balcones preocupado de que ella no le encuentre "tonto te as vuelto a enamorar" se reprochó y comenzó a llorar. De pronto siente que alguien le toca en el hombro, era la joven, cuando Gabriel se gira ella le seca las lágrimas y saca una pequeña pizarra donde le escribe "no llores" Gabriel mira el mensaje, seguidamente la mira a los ojos y ella con gestos le explica que es muda, Gabriel sonríe pensando "ella me comprende" cogiéndole la pizarra le escribe "soy Gabriel" ella lee y le escribe "yo soy keira", él vuelve a sonreír y haciendo su truco de magia hace aparecer una rosa para ella , keira mira la rosa y cogiéndola se pone a llorar, Gabriel le seca las lágrimas y le da un pequelño beso, después coge su violín, ella le abraza mientras comienza a tocar una bella canción de amor, saliendo el arco iris sobre la ciudad de Venecia.

sueños dormidos de mago de oz


YA VA SIENDO TIEMPO QUE SUS RECUERDOS LIBRAN BATALLA CONTRA EL OLVIDO.
PUES SE CONGELO EL CALENDARIO Y SE FUGO SU MEMORIA CON LO VIVIDO.
HAY, QUE VER COMO DUELE REBUSCAR EN EL DIARIO Y SABER QUE TE FALTA, QUE TE HAN SECUESTRADO AÑOS.
AUNQUE NO TE ACUERDES YA DE MI, YO SIEMPRE CUIDO DE TI, ME HE CONVERTIDO EN LUZ, PARA GUIARTE HASTA MI.
QUIERO ENCONTRAR AQUELLOS VERSOS PERDIDOS, TANTOS SUEÑOS QUE SIGUEN DORMIDOS Y VOLVER A RECORDAR.
QUIERO BUSCAR CONTIGO UN NUEVO CAMINO, PUES SIENTO QUE ESTOY PERDIDO, Y NO LLORAR POR NO PODERTE RECONOCER.
VER NACER LOS DÍAS ES VER MAR, UN SILENCIO, RESIDE SOL DE EXTRAÑOS.
HAY, QUE VER COMO DUELE, QUE TE FALTEN HOJAS DEL DIARIO.
AUNQUE NO TE ACUERDES YA DE MI, SIEMPRE ESTARÉ JUNTO A TI, AHORA SOY NACIÓN QUE ESPERA BROTAR EN TI.
QUIERO ENCONTRAR AQUELLOS VERSOS PERDIDOS, TANTOS SUEÑOS QUE SIGUEN DORMIDOS Y VOLVER A RECORDAR.
QUIERO BUSCAR CONTIGO UN NUEVO CAMINO, PUES SIENTO QUE ESTOY PERDIDO, Y NO LLORAR POR NO PODERTE RECONOCER.
QUIERO ENCONTRAR AQUELLOS VERSOS PERDIDOS, TANTOS SUEÑOS QUE SIGUEN DORMIDOS Y VOLVER A RECORDAR.
QUIERO BUSCAR CONTIGO UN NUEVO CAMINO, PUES SIENTO QUE ESTOY PERDIDO,Y VOLVER A RECORDAR.
QUIERO ENCONTRAR AQUELLOS VERSOS PERDIDOS, TANTOS SUEÑOS QUE SIGUEN DORMIDOS Y VOLVER A RECORDAR

sábado, 27 de marzo de 2010

angel de alas negras


y si el ángel de alas negras tiene el corazón roto?
y si el ángel de alas negras ya no tiene alas para volar?
y si el ángel de alas negras esta roto y nadie lo puede reparar ?
y si el ángel de las negras se convirtió en la muerte y mato a ese maldito cupido?
y si el ángel de alas negras ya no ve la luz del sol?
y si el ángel de alas negras te tenia a ti por sol?
y si el ángel de alas negras esta muerto por dentro?
y si el ángel de alas negras no quiere seguir aquí?
y si el ángel de alas negras esta solo?
y si el ángel de alas negras te necesita como al aire?
y si el ángel de alas negras te quiere?
y si el ángel de alas negras se convirtiera en piedra?
y si el ángel de alas negras eres tu?
y si el ángel de alas negras soy yo?

domingo, 14 de marzo de 2010

Raid



Raid corre por los oscuros túneles, en busca de una salida al exterior, era un drow que había osado desobedecer a Lloth y su castigo era la muerte; pero él no estaba dispuesto a abandonar su vida; quería luchar por conservarla; para ello debía salida la superficie, aunque el sol le cegara al principio, ya se acostumbraría a él, o eso al menos era lo que pensaba. Llevaba días corriendo huyendo de los guardias y ahora por fin ante sus ojos estaba la salida de aquella odiosa vida, donde solo seria un juguete más. Raid corre con todas sus fuerzas y sale al exterior jadeando.

La luna llena brillaba en el cielo mientras en el bosque había una joven vestida de negro y encapuchada, ella sin saberlo se aproxima a la que seria la entrada a los túneles de los drow, camina tranquila y segura de si misma, tarareando una dulce y triste canción.

Raid mira al cielo contemplando su belleza y magnitud, era tan distinto al techo de los túneles, durante años le han enseñado a que todo aquello que se encontrara en la superficie era horrible y detestable; pero lo que ahora observaban sus ojos era belleza. Fascinado por la hermosura del paisaje llega a sus oídos una enigmática melodía, Raid rápidamente desenvaina sus cuchillos largos y se esconde entre unos arbustos.

La joven encapuchada llega a aquel lugar sin que cese su canción, Raid sin pensárselo decide atacarla saltando de los arbustos; pero para su sorpresa va armada y anula su ataque, él cae al suelo desarmado mirando sorprendido como ser el mejor de la a academia de guerreros no le a servido de nada contra aquella mujer, ella guarda su daga mientras le mira fijamente:

- ¿Quién sois? – pregunta para asombro de Raid en la lengua drow-.
- Mi nombre es Raid – contesta él mirando al suelo-.

Ella sonríe, sus labios era lo único que las sombras de su capucha no ocultaban, Raid vio aquella sonrisa como lo mas bello del mundo exterior, que había visto, las sonrisas de las mujeres de su raza ocultaban odio y maldad; pero la de ella era una sonrisa dulce.

La noche se había desvanecido y el sol empezaba a brillar; para su sorpresa la joven había desaparecido conforme los rallos del sol la tocaron, Raid se refugio del sol entre las sombras del bosque, mientras que sus ojos se van acostumbrando poco a poco a la luz, deambula por el bosque sin saber donde ir, hasta llegar un lago, se sienta en la orilla hambriento, llevaba días sin comer…

Raid despierta en una sala con muchas camas con heridos y enfermo, extrañado ve que en una pequeña mesa a su lado hay una bandeja de comida, sin dudárselo se tira a ella prácticamente engulléndola, Cuando termina con toda la comida ve que a los pies de su cama esta sentada una elfa con expresión alegre, Raid la mira sin hablar ya que no entendía su lengua, la joven le tiende un cántaro con agua que el coge tembloroso y bebe de ,el, la elfa recoge la bandeja y el cántaro vacíos y se aleja de él. Raid se queda sentado en la cama, sin saber que hacer, mira a su alrededor y ve como las mujeres obedecen a los hombres “esto es el paraíso” pensó y ve como una especie de hechicero se le acerca, Raid le mira a los ojos, el hechicero sonríe y empieza a hablarle en lengua drow:

- Saludos joven drow, te encontraron los guardias inconsciente en la orilla del lago, entonces te trajeron aqui, por verte solo y hambriento deducimos que has escapado de lo tuyos – le explica serio -.
- Llegue casi al amanecer; pero cuando a un era de noche encontré a una mujer encapuchada; pero los rayos del sol la hicieron desaparecer, entonces merodee hasta llegar al lago – le cuenta él-.

El hechicero frunce el ceño al escuchar lo de la mujer y mira a Raid y suspira:

- La mujer se llama Noah, nuestra princesa, pero tu diosa la maldijo con que solo en la noche podría vivir, de día se desvanece, sin sombras, sin noche es como si no existiese.

Raid se queda pensativo, el hechicero le dice que tendrá alojo en la fortaleza elfica y que los guardias no le atacaran, entonces al oscurecerse el día decide salir al bosque en busca de la princesa, tras unos minutos internándose en el bosque llega al lago donde se desmayó, en su orilla se encuentra las ropas de la princesa, miró entonces al lago, y la vio nadar en él, decidió esconderse entre la maleza mientras ella salía desnuda del lago, Raid se fijo entonces en su cuerpo, en su rostro, pensando en que si fuera una matrona drow él ya estaría muerto por osarse a mirarla de tal modo, pero eso no le importaba y miraba atento su rostro de labios carnosos y rojos, de cabellos oscuros y largos, de ojos negros, Raid no podía parar de mirarla y mirar su hermoso cuerpo desnudo de piel blanca, para desgracia ella comienza a vestirse sentándose seguidamente en la orilla del lago. Raid se acerca a ella poco a poco…
Noah se gira al notar su presencia; pero se limita a mirarle sin moverse, Raid intimidado se queda quieto y baja la mirada. Ella sonríe y levantándose camina hacia él, alzándole a cabeza cogiendo le de la barbilla, Raid vuelve a fijarse es su rostro perdiéndose en la oscuridad de sus ojos, por instinto acerca sus labios a los de ella besándola, Noah se aparta mirándole sorprendida, entonces echa a correr. Raid corre tras ella cojiendo la por una de sus muñecas deteniéndola:

- Sois un insolente por atreverte a besarme – le dice ella seria -.
- Lo siento – susurra-.

Ambos se miran fijamente a los ojos y sin pronunciar ni una palabra mas se funden en un apasionado beso, Raid abraza a Noah contra su cuerpo, acariciándola sin dejar de besarla, poco a poco él la va despojando de sus ropas besando su suave y pálida piel. Noah se deja besar mentras ella tambienn le quita las ropas a él. Raid y Noah quedan tendidos en el suelo desnudos, sin dejar de besarse ni una sola vez, los dos se dejan llevar por la pasión, tomándose el uno al otro.
Finalmente quedan abrazados sus cuerpos despojados de ropa y llenos de pasión, Noah le mira avergonzada por sus actos y comienza a vestirse sin mirarle a los ojos, Raid con un jadeo se pone en pie abrazándola por la cintura y besándola en el cuello, ella le aparta bruscamente, él suspira y la mira:

- ¿Qué demonios te pasa? ¿no te gusto como estuve? – le reprocha él -.
- No entiendes nada, acabo de deshonrar a mi pueblo al yacer contigo.
- ¿deshonrar? Tu pueblo te olvido por tu maldición.

Noah le mira con rabia y el sol hace que se desvanezca, Raid grita de impotencia “maldita maldición”, vuelve a la ciudadela esperando ansioso a que anocheciera. Cuando lo hizo no sabia donde podría encontrarla, merodeando por el bosque llega a una especie de templo, mirando al suelo vio manchas frescas de sangre, siguiéndolas llegó hasta donde Noah yacía moribunda en un gran charco de sangre, y rodeada de arañas. Raid corre hacia ella cogiendo la entre sus brazos la mira a los ojos, ahora pagados, sin luz:

- Aguanta mi princesa – le dice abrazándola-.
- Ya ni en la noche puedo vivir

La sangre le resbala por los labios; Raid la besa manchándose con la sangre de sus labios, coge la daga que lleva ella en su cinturón, Noah sin fuerzas intenta detenerle:

- solo soy la princesa de dos noches, detente – le suplica-.
- Mi mundo superficial esta contigo, si tu te vas yo también

Raid se apuñala a si mismo cayendo al suelo junto a ella, cogiendo la de la mano, vuelve a besarla, en un ultimo y tierno beso, ambos respiran por ultima vez, muriendo juntos, abrazados.
El día llega y con él los sacerdotes del templo encuentra los cuerpos de los amanes, sin vida y sin color, ambos fueron enterrados juntos, como los encontraron, juntos para la eternidad.

lunes, 1 de marzo de 2010

Roy...

Roy...

Casi había caído la noche cuando una de las sirvientas entró en la sala del trono, donde en ese momento se encontraba la princesa, la doncella llevaba en brazos a un niño herido:

- Mi señora, los guardias le han encontrado en las puertas del castillo ¿qué debemos hacemos con él? - pregunto la criada cabizbaja-.

- Llevadle a un orfanato - fue la firme respuesta de la princesa-.
- Pero su majestad, esta herido.
- En ese caso curadle, y cuando sane llevadlo - reponde en un suspiro Noah, la princesa-.
La sirvienta abandona la sala y lleva al niño a la enfermería, tumbándole en la cama le desnuda y limpia sus heridas. Mientras tanto Noah se encierra en sus habitaciones y se pone a peinarse sus cabellos, hasta k a interrumpe el sonido de una risa malvada e infantil, sin darle importancia sigue cepillando su pelo, hasta que alguien llama a la puerta, ella abre, encontrándose a la criada:

- ¿Qué ocurre? - le pregunta extrañada y confusa-.

- Es el niño, se ha escapado - dice la doncella angustiada-.

- Pero si estaba herido, buscadlo los guardias no le habrán dejado salir - le dice mientras el niño aparece denudo en el pasillo-.
-
El niño empieza a reírse, mientras tanto la sirvienta le mira con alivio u la princesa con odio:
- Pronto este castillo será mío, yo me convertiré en el rey del mal, y tu princesa serás una mas de mis esclavas - dice el niño mientras ríe-.
- Mirad mi señora, ¿no es una monada? se cree malo y todo - dice la sirvienta-.

- Mira niñato, este castillo jamás será tuyo, aquí habita un ser oscuro, no quieras convertirte en su alimento - dice la princesa con rabia-.

El niño la mira con odio, casi rompiendo a llorar, la criada mira al pequeño sonriendo:

- Puedes quedarte lo si quieres - le dice Noah a la sirvienta-.

-TE ODIO!!! ALGÚN DÍA TE MATARE, LO JURO!!! - dice el niño con rabia y frustración-.

La princesa cierra la puerta de la habitación de un portazo dejándoles en el pasillo


*****

Los años pasan , mientras tanto la princesa no ha envejecido, y Roy, el niño, ya tiene su edad y ha estado siendo entrenado como guerrero, adquiriendo también una gran confianza con el rey, cosa que disgustaba y bastante a Noah. Una noche mientras cenaban el rey notaba a su hija fría y distante:
- Noah, hija mía, ¿qué te ocurre? - le pregunta el rey preocupado-.
- Nada - es su corta respuesta-.
Cuando termina de comer se va corriendo a su habitación, cruzándose con Roy e intercambiando con él miradas de odio, Noah no sale de su habitación, hasta que su padre llama a la puerta y ella la abre:
- Sal hija, hoy es tu fiesta de cumpleaños y Roy desea darte una sorpresa - le dice el rey alegre-.
- No voy, mi cumpleaños es dentro de dos semanas y no quiero nada de Roy, no confió en él - es la borde respuesta que le da a su padre, cerrándole la puerta-.
El rey se queda en el pasillo entristecido por el comportamiento y el ánimo de su hija, mientras tanto ella se ha sentado en la cama, cuando de pronto Roy entra por la venta.
-¿Qué haces aquí? - le grita ella-.
- He venido a decirte que me voy, si me quedo aquí jamás cumpliré mi sueño y me convertiré en algo que no soy, considera mi marcha un regalo de cumpleaños - le explica-.

- Eres un cobarde incapaz de luchar por sus deseos.
- Pero eso si, te juro que algún día te matare.
Ella con rabia le tiende una daga mientras le mira firmemente a los ojos.
- Vamos, solo tienes que apretarla contra mi corazón, es lo que ambos deseamos - le dice con los ojos llorosos-.
Roy coge la daga y la coloca en el corazón de ella pensando "solo tienes que apretar" pero en vez de apretar arroja la daga a la chimenea y se queda mirando a Noah a los ojos:
- ¿Porqué no cumples tampoco este deseo? - le reprocha ella-.
- Porque llevo tanto tiempo deseándolo que ahora no quiero que se acabe - es su respuesta-.
- Te echas atrás también en este deseo, eres un cobarde.
- TE ODIO TE ODIO TANTO - le grita Roy cogiéndola por la cintura -.
- Yo también te odio a ti.
Roy la besa firmemente en los labios y después la suelta y mira como ella se a puesto a llorar, entonces el se va por la ventana y se queda en el bosque a dormir incapaz de alejarse mas de su princesa oscura, ella se acurruca junto a la ventana esperando su regreso. Varios días después el aparece de nuevo en su ventana:
- Otro deseo del que te echas atrás, es eso o no sabes lo que deseas - le dice ella secándose las lágrimas-.
- Se lo que deseo, te deseo a ti.
Con esta frase Roy vuelve a besarla en los labios con pasión mientras la abraza y ella llorando se acurruca en sus brazos.